El verano es una estación en la que muchas personas aprovechan para leer libros, ya que dado que las vacaciones son normales en esta época del año, se tiene más tiempo para poder leer y disfrutar de las páginas llenas de aventuras, romances o datos históricos. Hay un tipo de libros del que vamos a hablar hoy, los diarios, entre los cuáles destaca el famoso diario de Ana Frank.
Aunque tampoco podemos olvidarnos de otros géneros de igual importancia, como puede ser el género de aventuras, la novela histórica o los ensayos. También existen libros didácticos que en esta época del año son utilizados por los jóvenes en todos los niveles de enseñanza. Ediciones Aljibe es una editorial con 25 años de experiencia, que es referente en publicaciones de temática educativa, especialmente en la atención a las Necesidades Educativas Especiales, aunque dispone en su catálogo de una gran variedad de géneros.
Lo que hace especial a los diarios es el estilo personal y único de los autores, ya que aquí no influye que el autor esté escribiendo para gustar a un editor o no como se hace con una novela. Tampoco está la necesidad de buscar recursos retóricos que le den la vuelta al texto como si de un hula hoop se tratara.
Lo que es interesante y cautivador de un diario son sin duda las experiencias que se cuentan, normalmente llenas de detalles y de cariño. Estas, además de ser un recurso para registrar ideas, pensamientos o sucesos, sirven para clasificar que es lo que ha pasado en tu vida y cómo ha pasado.
Muchas personas escriben diarios para ellos mismos, pero ahora que las mascotas se han convertido en un miembro más de nuestras familias, se están realizando diarios en los que se registra cuáles han sido las vivencias de las mascotas, quedando registrado cuando aprendieron a sentarse o a hacer algún truco interesante.
Estos diarios son llevados por los dueños de las mascotas, ya que a pesar de que nuestras mascotas puedan comunicarse con nosotros y entendamos qué quiere decir ese gesto toan amable, no pueden escribir. Esto también pasa con las redes sociales, y es que hay muchos animales que tienen un perfil en redes sociales.
Igualmente, estos son llevados por los dueños, pero en este caso juegan un papel determinante en los casos de adopción. Muchas perreras han creado perfiles que alimentan con contendido de la mascota en cuestión, y el propósito final del perfil es dar a conocer al animal para encontrarle un hogar lo antes posible.
En cualquier caso, centrándonos en que la mayoría de diarios son escritos por personas teniendo en cuenta los sucesos de la vida de ellas mismas, merece la pena preguntarse qué beneficios o perjuicios para nuestro cerebro genera escribir un diario. Aquí la psicología entra en juego y nos recomienda escribir un diario para mejorar nuestra salud mental.
Escribir ayuda a liberar la mente
Está científicamente demostrado que aquellos estudiantes universitarios que cogen sus apuntes con el clásico papel o boli retienen mejor los conocimientos, que aquellos que recogen los apuntes a ordenador. En el caso de los diarios, se han demostrado los efectos beneficiosos que tiene escribir acerca de las situaciones dramáticas o dolorosas que se experimentan en primera persona, sobre la salud física y emocional.
El impacto de la escritura expresiva genera un aumento a corto plazo del estado anímico negativo, y de los síntomas físicos en comparación con los controles llevados a cabo a medio y largo plazo. En este último periodo se ha encontrada una evidencia de beneficios para la salud en términos de resultados evaluados de manera objetiva, así como en la perfección emocional.
Existen varios motivos posibles por los cuáles se producen estos resultados. Por un lado tenemos que tener en cuenta la catarsis emocional, no hay suficiente apoyo para la hipótesis de que la escritura expresiva opera a través de un proceso de ruptura emocional, esto suele generar un efecto negativo inmediato y no se han demostrado efectos físicos o psíquicos positivos.
Pero si que es cierto que afrontar las emociones puede reducir el estrés fisiológico que resulta de la inhibición, y aquí cobra mucho sentido la teoría de Pennebaker, que propone que la inhibición sirve como factor de estrés acumulativo.
En conclusión, la escritura expresiva ha recogido resultados prometedores usando tareas de escritura básicas. Pero lo que es cierto es que la escritura expresiva en la práctica clínica está genera beneficios a medio largo plazo, como consecuencia del desahogo y la sensación de haber plasmado un problema que en muchas ocasiones no se puede explicar ni a los especialistas.