Los perros son más que simples mascotas, son parte de nuestra familia y merecen recibir una alimentación adecuada y equilibrada para mantenerse saludables. La dieta de un perro juega un papel fundamental en su bienestar general, ya que afecta a su sistema digestivo, pero también a su nivel de energía e incluso una buena dieta hace que tenga un pelaje brillante. Por eso, en este artículo vamos a dar algunos consejos de alimentación para perros que te ayudarán a cuidar la salud de tu mascota.
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Consulta con tu veterinario
Antes de nada, hay que indicar que es conveniente consultar con el veterinario cuál es la alimentación adecuada para tu mascota. Y es que cada perro es único. Por lo que tu profesional de confianza podrá evaluar su salud general y proporcionarte recomendaciones específicas en cuanto a sus necesidades alimenticias.
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Elige un pienso de calidad
El pienso es la base de la alimentación de cualquier perro. Por eso hay que escoger un pienso de calidad. Debes intentar que el pienso contenga ingredientes naturales, leer las etiquetas y buscar aquellos piensos que tengan altas fuentes de proteína como carne de pollo, salmón, otros pescados o carne de pavo. También debes evitar aquellos piensos que tengan rellenos poco nutritivos.
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Ten en cuenta la edad y el tamaño
Los perros tienen diferentes requerimientos alimenticios en función de su edad y tamaño. Los cachorros necesitan una dieta rica en nutrientes para su crecimiento, mientras que los perros adultos pueden beneficiarse de una alimentación más equilibrada. Además, los perros de razas grandes pueden requerir una alimentación específica para mantener sus huesos y articulaciones sanos.
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Controla las porciones
El sobrepeso puede ser perjudicial para la salud de tu perro y aumentar el riesgo de enfermedades como la diabetes o problemas articulares. Sigue las pautas de alimentación recomendadas por el fabricante del alimento y ajusta las porciones según la edad, peso, nivel de actividad y metabolismo de tu perro. Pero si tienes dudas, seguro que tu veterinario podrá guiarte para establecer la cantidad adecuada de alimento para tu mascota.
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Ten cuidado con los huesos
Es común pensar que los huesos son buenos para los perros, pero hay que tener cuidado porque pueden ser perjudiciales. “La ingesta de huesos puede provocar desgaste y fracturas dentales, huesos anclados en la mandíbula o heridas en la boca. Y lo más común es que provoquen obstrucciones del tránsito intestinal y estreñimiento grave. Estas dos últimas patologías pueden ocasionar una urgencia e incluso se tiene que anestesiar al animal para poder vaciar el contenido y en casos graves la resección de un trozo del colon”, explican desde Naya Clínica Veterinaria, centro de referencia en Ponteceso.
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Evita algunos alimentos tóxicos
Algunos alimentos son tóxicos para los perros y pueden causarles graves problemas de salud. Entre ellos se encuentran el chocolate, las uvas, las cebollas, el aguacate y la cafeína. Pero si quieres aprender más sobre los alimentos perjudiciales para perros te recomendamos leer este artículo.
Así que asegúrate de mantener estos alimentos fuera del alcance de tu perro y de informar a tu familia y amigos sobre los peligros de compartir alimentos inapropiados con tu mascota.
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Controla los premios
Los premios y golosinas pueden ser una gran ayuda para educar a tu perro. Sin embargo, es importante controlar su consumo. Y es que el exceso de premios puede contribuir al sobrepeso y desequilibrar la dieta general. También debes intentar optar por premios saludables como podrían ser algunas verduras. Pero sobre todo tienes que limitar la cantidad para evitar problemas de salud a largo plazo.
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No cambies bruscamente de dieta
Si necesitas cambiar la dieta de tu perro, hazlo de forma gradual. Los cambios bruscos pueden causar problemas digestivos como diarrea o malestar estomacal. Para hacer el cambio de manera gradual puedes mezclar el alimento nuevo con el anterior durante varios días hasta que tu perro se adapte por completo a la nueva dieta.
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Hidrata a tu perro
El agua es esencial para la salud y el bienestar de tu perro. Asegúrate de que siempre tenga acceso a agua fresca y limpia. Cambia el agua regularmente para mantenerla en buen estado y coloca recipientes de agua en varias áreas de la casa, especialmente en los lugares donde tu perro pasa la mayor parte del tiempo. Así como no te puedes olvidar de llevar una botella de agua cada vez que salgas de paseo.
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Sigue una rutina alimentaria
Y por último tienes que intentar seguir una rutina. Y es que establecer una rutina de alimentación regular es beneficioso para tu perro. Porque los perros son animales de hábitos y se sienten más seguros cuando tienen una estructura diaria. Además, alimentar a tu perro a las mismas horas todos los días ayuda a regular su sistema digestivo y a mantener un ritmo estable.
Siguiendo estos consejos podrás cuidar la alimentación de tu mascota y su salud en general para que pueda crecer sano.
